En un contexto de urgencia ecológica, se han puesto en marcha varias medidas para conciliar las inversiones financieras y el desarrollo sostenible. Muchos bancos ya han tomado la iniciativa y ofrecen servicios adecuados.
¿Cómo actuar para mejorar su impacto medioambiental?
Para los bancos :
- Desarrollar «ofertas verdes» para sus clientes. Según un estudio del Ifop (Instituto Francés de Opinión Pública), el 60% de los franceses presta atención a sus inversiones teniendo en cuenta el impacto medioambiental.
- Proponer nuevos fondos de inversión: el objetivo es orientar al cliente hacia unas finanzas más sanas invirtiendo en acciones de empresas que actúan en favor de un medio ambiente sostenible.
Para los clientes:
- Actuar directamente sobre sus ahorros. Hoy en día, hay varias formas de hacer un seguimiento de sus ahorros. Por ejemplo, la aplicación RIFT lo hace y permite deducir el impacto social y medioambiental.
- Elija un banco ético que adopte una postura sobre cuestiones medioambientales y sociales.
Algunos de los bancos privados más comprometidos ofrecen a sus clientes Inversión Socialmente Responsable (ISR). La etiqueta ISR permite a los inversores invertir en valores que concilian las inversiones financieras con el desarrollo sostenible.
Además, el enfoque ESG (Environmental, Social and Governance), que incluye criterios como la lucha contra la corrupción, el empleo de personas discapacitadas y la transparencia de la remuneración de los ejecutivos,se desarrollará a través de nuevos objetivos.